- El acuerdo entre el PSOE y Sumar incluye medidas para reducir los vuelos domésticos en rutas con una alternativa ferroviaria que tome menos de dos horas y media, excepto en los casos en que se conecten con vuelos internacionales.
Yolanda Díaz, durante la presentación del acuerdo, destacó que el tren debe ser el principal medio de transporte en el siglo XXI y que se deben eliminar los vuelos cortos siempre que exista una alternativa ferroviaria. En España, existen vuelos diarios entre ciudades como Alicante, Barcelona, Málaga, Sevilla, Valencia y Madrid, que tienen una alternativa en tren de alta velocidad de aproximadamente dos horas y media. Sin embargo, estos vuelos no tienen una conexión directa con el aeropuerto de Barajas, que es un punto de partida importante para los vuelos internacionales, aunque se espera que la alta velocidad llegue al aeropuerto en los próximos años.
En otros países como Francia, se han prohibido vuelos que recorren distancias inferiores a 400 kilómetros o que tienen una alternativa en tren de dos horas y media, lo que ha tenido un impacto en los vuelos entre ciudades como Nantes, Burdeos, Lyon y París-Orly.
Javier Gándara, presidente de la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), considera razonable que haya un trasvase del avión al tren desde que se liberalizó el mercado ferroviario. Sin embargo, cree que el tren debería ser un medio complementario y que seguirá siendo popular entre aquellos cuyo destino final es una ciudad conectada por tren. Estima que alrededor del 10% de los pasajeros en vuelos entre Madrid y otras grandes ciudades son pasajeros en conexión, y si se les obliga a usar el tren, su viaje se volverá más lento debido a controles adicionales y facturación de equipaje.
Fernando Candela, presidente y consejero delegado de Iberia, coincide en que es necesario un acceso sencillo al aeropuerto de Barajas para eliminar los vuelos de corto radio. De lo contrario, los pasajeros optarán por vuelos con escalas en grandes aeropuertos europeos en lugar de volar directamente a Madrid.
El acuerdo también incluye medidas relacionadas con la vivienda turística, la revisión de la regulación en áreas de alta demanda, y el fortalecimiento de programas de turismo y termalismo del Imserso. Además, se impulsa la Estrategia de Turismo Sostenible 2030 y el uso de la digitalización y datos en el sector turístico.